El Palacio de la Condesa de Lebrija, en Sevilla, está ubicado en una de las calles más concurridas del centro de la ciudad, la calle Cuna, paralela a la famosa calle Sierpes. Data del siglo XVI y lo más característico es la impresionante colección de mosaicos romanos, que pavimentan prácticamente toda la planta baja, por lo que es considerada la "casa-palacio mejor pavimentada de Europa".
Comienza a construirse como casa señorial con el estilo propio del siglo XV, la fachada es de estilo sevillano realizada en el mismo siglo, entre los siglos XVIII y XX es remodelado y ampliado.
En sus orígenes esta casa perteneció a la familia Paiba, posteriormente fue propiedad de los condes de Corbos y los condes de Miraflores. En el año 1901 pasa a ser propiedad de Regla Manjón Mergelina (condesa de Lebrija) que lo restaura y acondiciona para albergar su valiosa colección de antigüedades, como apasionada por la arqueología decidió adornarlo con piezas que aparecieron en terrenos de su propiedad, así como otras colecciones que compraba a comerciantes de antigüedades amigos suyos.
Tiene una superficie de aproximadamente 2.500 m² repartida en dos plantas.
Presenta una portada de dos cuerpos, labrada en mármol, con pilastras en los lados de la planta baja. Se accede a un zaguán con techumbre de madera, separado por una amplia reja de hierro dorado y policromado. La solería del pavimiento constituye uno de los elementos más destacados del palacio, se trata de un opus sectile compuesto por mármoles romanos polícromos. Es destacable también la gran colección de azulejería de toda la casa, que data desde el siglo XVI. En el patio central, destacan las yeserías que adornan arcos con columnas de mármol, y el mosaico romano que data del siglo II y III. Este mosaico apareció en terrenos propiedad de la condesa, concretamente en el olivar de los Palacios. El medallón central representa al Dios Pan con la flauta, enamorado de Galatea, a la cual dedica sus sones y cantos, ocho medallones representan escenas de las aventuras amorosas de Zeus y en las esquinas se encuentra la representación de las estaciones del año.
Sus paredes son un auténtico muestrario de estilos arquitectónicos poseyendo elementos como arcos de traza árabe, adornos platerescos, zócalos de azulejos procedentes de un convento en ruinas, artesonado de un palacio del siglo XVI, un friso renacentista, la fachada y planta al estilo andaluz sevillano.
La planta baja está compuesta por varios salones y patios donde se encuentran los restos arqueológicos y colecciones. En la planta alta se muestran las estancias mantenidas tal como vivía la familia, hasta que falleció el último Conde de Lebrija en 1999. En esta planta se exponen asimismo los objetos comprados por la condensa durante sus viajes. También posee una amplia biblioteca con un número superior a 4.000 volúmenes.
Hola Conchi,que te puedo decir!!Impresionante!! te lo digo de corazón porque me llena de orgullo que una mujer sea tan inteligente sobre todo explicando de una forma tan fácil,eso es un don.
ResponderEliminarEl palacío ya lo conocía,pero solo lo vi y eso para mi no vale,pero ahora si lo conozco.Gracias.
Un abrazo Conchi.
¡¡Hola FANTASÍA!!! yo aún no conozco el palacio pero este año está en mi pensamiento hacerlo. Un abrazo.
EliminarConchi.
Debe de ser digno de ver. ¡Hay tantas cosas que no podemos visitar...! pero con comentarios así y con tu información podemos imaginárnoslos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Amiga Aurora, España es tan rica en palacios, castillos y monumentos que nunca acabaríamos de ver tanta belleza. Un abrazo.
EliminarConchi
Como siempre has hecho un despliegue enorme de documentación.
ResponderEliminarNo lo conozco y cuando vaya a Sevilla, me gustaría visitarlo...Debe de ser imponente.
Abrazos y besos.
Hola Pedro Luis, este año quiero ir de vacaciones a Sevilla y ya he tomado nota para visitarlo, si es así ya te lo comentaré.
EliminarUn abrazo.
Con este relato tuyo apetece conocerlome gustaría jooo me encant´´o y me atrapó ojal tenga la oportunidad, besos desde mi brillo del mar
ResponderEliminarQuerida amiga Beatriz, espero que pronto tengas la oportunidad de visitarlo. Un abrazo.
EliminarConchi
Lo visité en una ocasión pero de eso hace ya muchos años y apenas recordaba nada, gracias a ti he vuelto a recordarlo.
ResponderEliminarBesos
Hola Julia, yo nunca lo he visitado, pero, espero que este año lo podamos visitar juntas ¿te parece bien?. Un abrazo.
EliminarConchi
Gracias Priego, por tan detallada descripción de este palacio de la condesa de Librija. Ahora vivo en Cádiz y cuando vaya a Sevilla, intentaré visitarlo. Me ha encantado tu descripción.
ResponderEliminarCon ternura
Sor.Cecilia
¡¡¡Bienvenida de nuevo Sor Cecilia!!! Ahora que está tan cerca de Sevilla tendrá una buena ocasión para visitar el palacio. Gracias por su visita. Un fuerte abrazo.
EliminarConchi
hola conchi,muchas gracias amiga por este hermoso paseo para conocer este hermoso palacio en sevilla.
ResponderEliminarte dejo besitos y muchas gracias por visitarme siempre amiga.
feliz semana!!!!!
Hola Sony me alegra que te haya gustado el paseo. Un abrazo.
EliminarConchi
Hola Priego, precioso tu blog, tus letras han sido como guia para visitar con la imaginación el palacio de la condesa de Lebrijas, me ha encantado, te felicito. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarLola.
Amiga Lola, de momento yo también lo he visitado con la imaginación, espero hacerlo pronto en persona. Un abrazo.
EliminarConchi
Hace años que visité este palacio pero, la verdad, ya no me acordaba de él.
ResponderEliminarInteresante y aleccionador tu post.
Un abrazo.
Hola Belén, ya va siendo hora que de nuevo lo visites y así, seguro que encuentras detalles que en la primera visita no los descubriste. Un abrazo.
EliminarConchi